jueves, 20 de diciembre de 2007

For every sin, I'll have to pay

For every sin, I´ll have to pay
I´ve come to work, I´ve come to play
I think I´ll find another way
It´s not my time to go
(Die another day, Madonna)

Pues ya está hecho, he encontrado un piso en una semana que me ha parecido bien de precio y he dado el salto. La dirección... el título se explica en la dirección.
Ahora busco hipoteca, que es algo que no entiendo. Con el mismo diferencial, ¿cómo puede haber tanta diferencia de cuota?
Bueno, seguiré contando.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Close the door, please

Que se puede traducir como voy a pegarte con la puerta en las narices, gili------. Y es que a veces tienes una rendija abierta para que se ventile la casa (nada que ver con tener la ventana abierta del blog anterior), que hay que airear de vez en cuando las sábanas, piensas que esa rendijita que te abrieron, ya que tú no la buscaste, puede refrescarte y resulta que todo es imaginación tuya, que lo que ha estado pasando ha sido un intento fustrado en un momento de confusión mental, quizás propia de la "edad".
Ahora me encuentro con la nariz un poquito dolorida y con la mala leche propia de los deseos reprimidos. Y pensé que el sábado sería la hora de resarcirme.
Pero no voy a ir en contra de mi naturaleza por un simple portazo, así que el sábado me dediqué a hacer lo que me apetece: bailar y reírme de la vida con mis amigos.

viernes, 7 de diciembre de 2007

El chiste...

Niño, abre la ventana que entre el Fresco.
Y el Fresco se llevó el televisor, el vídeo, el microondas...

... y la moraleja

Cuando tienes una ventana o una puerta abierta, entra el fresco. Puede que eso quizás no haga que te acaben robando nada, aunque muchas veces te encuentras que ha desaparecido una parte de ti. Ves que por tu propia culpa se han llevado trocitos de tu persona que no vas a recuperar y acabas notando que tienes corrientes internas que te van desestabilizando de una forma sutil.
Te das cuenta que el tiempo ha sido perdido, sin posibilidad de volver a recuperarlo. Has estado con el cuerpo cortado, con tiritera. Tu estima se resiente al descubrir que has actuado de forma inconsciente.

E intentas de alguna forma recuperarte, volver a ser tú de nuevo, tomando nota de lo ocurrido para que no vuelva a ocurrirte. Así que te pones manos a la obra, te esfuerzas por cerrar la ventana y dejar que la calefacción vuelva a reconfortarte.

Hacer dinero (es tu tarea)


La canción de Amparanoia tiene razón. A partir de cierta edad es lo que tenemos que hacer. Nos planteamos buscar un trabajo, no sólo para sentirnos realizados como personas, sino porque necesitamos unos ingresos para poder tener una casa, comer, salir, comprar ropa, libros, etc.
Ya desde pequeños nos preguntan qué vamos a hacer, no sólo porque eso ya nos identifique como personas, sino porque debemos trabajar para ganar dinero.


Se dice que no es más feliz el que más tiene, sino el que menos necesita. Por eso se puede decir que hasta ahora el dinero no me ha quitado la felicidad, porque con mis ingresos tenía cubierto no sólo mis necesidades, sino los pequeños caprichos que me pudieran ir surgiendo.
Pero ahora eso ha cambiado.
Tengo que cambiar de piso para el verano. Hasta ahora he compartido piso y siempre he tenido la suerte de hacerlo con algún amigo. Ahora, a punto de cumplir los treinta, me encuentro en la tesitura de tener que elegir entre buscar piso acompañado con un extraño o buscar algo por mi cuenta. Si acepto lo primero, me encontraría con la posibilidad de estar incómodo en mi casa. Por lo que he decidido lo segundo. Y entro en el juego peligroso de necesitar más dinero.
Apoyado (o instado) por mis padres, empiezo la vorágine de buscar piso para comprar. Y las cosas entonces se hacen cuesta arriba. Tengo el apoyo económico de ellos para lo que vaya necesitando. Tendré, por supuesto, que recortar gastos y buscar, seguramente, otra fuente de ingresos como un alquiler o, incluso, un segundo trabajo.

Entrar en esa dinámica supone un cambio que me produce pavor a ratos, pánico en otros momentos e indiferencia cuando pienso que dios aprieta, pero no ahoga.
Hago cuentas y más cuentas, me siento como el señor Scrooge de "Cuento de Navidad", intentando contar los futuros ingresos, a repartir entre la futura hipoteca, la comida y el resto de mi vida. Pienso en mis clases de inglés, en la posibilidad de poder seguir pagando un gimnasio, en estudiar la promoción interna o cualquier oposición que me hiciera ganar más dinero; para todo ello intentar compaginarlo con la opción de volver a trabajar en una academia o dando clases por mi cuenta.
A veces hasta bromeo con la idea de buscar pareja, no ya por todas las cosas bellas que tiene el amor, sino por tener alguien que me ayude con la hipoteca.

También están los consejos de la gente, que muchos a mi alrededor ven lo más normal comprar un piso y tener que sacar dinero como sea. Así son las cosas, un mileurista es lo más normal del mundo en nuestros días, y una hipoteca que sea más de la mitad de la nómina a pagar en 35 años, ahora no sólo no sorprende, sino incluso pensar que algo no anda bien es un pensamiento estúpido.
Hay quien me aconseja comprar piso para alquilar habitación o trabajar por las tardes, para estar durante varios años teniendo un piso que sólo pueda disfrutar para dormir.
Todo se vuelve confuso cuando pienso en las posibilidades que tengo en un futuro no tan lejano. Si acabo entrando en el mundo del adulto plenamente integrado, con hipoteca, quiero decir; espero que las cosas vayan hacia algún lado.

Foto sacada de:
http://www.masternewmedia.org/es/2007/02/11/monetizar_el_contenido_online_como.htm

lunes, 3 de diciembre de 2007

You have to understand the way I am

el amor es una aventura
por eso es mejor bailar



El sábado ordené mi habitación. Ya iba siendo hora, tras casi un mes en el que solamente he hecho pequeñas organizaciones, pero sin llegar a dejarlo totalmente ordenado. Además, he cambiado las bandejas para cartas (ese es el nombre que tienen en el idea) y he puesto la miniatura en madera de edificios londinenses que me han regalado por mi cumpleaños.
También he limpiado el resto de la casa, todo sea por estar durante esta semana en un ambiente que trasmita armonía y equilibrio.
Y es que el viernes empecé a leer algo sobre Feng Shui, pues hace años leí un libro que no pude terminar. De ese libro recordaba que es el dormitorio el lugar de la casa donde se reflejan las relaciones personales. Así, en vista del pequeño caos en el que tenía metido mi habitación, lo mismo está repercutiendo a la hora de conocer “posibles parejas”. Y, sobre todo, ya va siendo hora de volver a poner orden en la habitación.
http://es.wikipedia.org/wiki/Teor%C3%ADa_del_orden
Una vez hecho el orden, aunque las vibraciones no me hicieran ligar, en el caso de ocurrir la otra persona no correría asustada, que ya es algo.
Así que el sábado noche salí a la calle con un nuevo halo, como si acabara de aparecérseme la Virgen María o convertirme en Super-guerrero. Y es que quiero empezar a salir con el chip cambiado, bailar mientras pongo mirada seductora. El Feng Shui puede ayudarme, una vez que tenga la actitud y no me avergüence de mi habitación, el resto es cuestión de tiempo.





Con estos ánimos, empecé haciendo botellón controlando a mi alrededor, tipo suricato, cualquier movimiento, en busca de una posible presa. La conclusión es que la gente de mi edad no suele hacerlo, lo que me puede hacer sentir un poquito fuera de lugar, rodeado de chavales de, como mucho, primeros de carrera, mientras yo me preocupo de si me desgravan el suficiente irpf para que el próximo año no me cruja hacienda.
Bueno, aunque ya tenga menos pelo, por lo demás soy una versión mejorada del Antonio que empezó la carrera hace ya unos añitos, por lo que tampoco tengo que preocuparme salvo que al niñato de al lado se le ocurra tirar una botella para parecer el más guay de la clase y yo acabe con 10 puntos en el hospital.
Tras el botellón, con unos cuantos grados más de alcohol en sangre, toca discoteca, donde ya puedo “relacionarme” con gente de mi edad. Menos mal, pues ya estaba empezando a sentirme en un vídeo de Rebelde Way. Ya en la discoteca empieza mi mayor problema para ligar: la música.
Si la música es buena, me pongo a bailar y llega un momento en el que me abstraigo, con lo que no hay nada que hacer, el suricato deja de mirar a su alrededor y empieza a moverse. Pero si la música es mala, la cosa es aún peor, pues pongo cara de perro, primero mirando al pone-discos de turno, para dejarla como look personal.
Este sábado la música era bastante buena para mi gusto (o mi nivel de alcohol demasiado alto), por lo que no paré de bailar en toda la noche y mi capacidad de observación se fue mermando a medida que pasaban las horas (y bebía más). Mis intentos de concentrarme a mi alrededor no dieron el resultado que yo esperaba, pues no conseguí mantener la vista fija en nadie que no fuera el grupo con el había entrado en la discoteca.
De todos modos, si los consejos del Feng Shui son ciertos, el segundo paso que tengo que cumplir será desechar los delirios de grandeza propios del funcionario recién nombrado.

Respecto al Feng Shui hay miles de entradas, yo he leido de estas dos:

http://www.estiloyhogar.com/soluciones/fengshui/index.cfm?pagina=soluciones_fengshui_006_006

http://www.innatia.com/s/c-feng-shui-gratis/a-conquistar-amor.html
y la foto del suricato está sacada de wikipedia:
http://es.wikipedia.org/wiki/Suricata_suricatta

viernes, 30 de noviembre de 2007

Esta semana



Esta semana no he tenido tiempo para pararme a descansar. No he dejado de hacer cosas, todos los días de un lado para otro. Entre estudiar inglés e ir al gimnasio, no he tenido nada más que unas horas para mí.
He empezado a pensar en el cambio de piso que realizaré en breve, pues seguramente empezarán las obras en el próximo verano. Así que tengo que empezar a buscar dónde voy a vivir.
Sinceramente tengo ganas de encontrar mi sitio, donde realmente sienta que es mi lugar.
Todavía no sé si acabaré compartiendo piso, alquilando solo o, incluso, comprar una vivienda con una buena subvención de mis padres.

Pues ha sido una semana agotadora, durmiendo todos los días después de las 12. Ahora, al salir del trabajo, me tomaré unas tapitas con mis compis de currelo y luego me iré a casa a descansar; que tengo que ordenar la habitación, para un mejor descanso (hoy he leído algo sobre Feng Shui).

jueves, 29 de noviembre de 2007

Si Carrie Bradshaw hubiera sido gay (relato corto)


Seguramente si Carrie Bradshaw hubiera sido un hombre gay le hubieran ocurrido historias mucho más dispares de las que nos han ido contando en sus 6 temporadas, hasta el punto de haber tenido tirón para, al menos, otra más.
Supongamos que, en lugar de Carrie, podemos llamarlo Charles (pondré solamente C.) y podemos empezar a contar un relato.

C. había quedado con un antiguo amante, ahora amigo, para tomar café en un nuevo bar. Este amigo, francés, llamado François (F), estaba esperándolo cuando llegó. Tras el segundo, F quiso pedir una copa. A las cuatro o cinco copas ya estaban bastante contentos.
F., bastante más contento porque había tomado una o dos copas más, preguntó a C. qué pensaba sobre su expareja Andreas, un alemán con el que F. seguía viviendo.
Entonces, tras responder que le caía bien, F. soltó una frase ambigua, que dejó a C. un poco descolocado: A Andreas le gustas tú.
En estas circunstancias C. nota que es importante que el idioma materno sea el mismo. No termina de entender la frase, y por mucho que F. intente volver a explicarla, acaba pareciendo que Fran quiere que ocurra algo entre Charles y Andreas. Resulta extraño cuando parece que el propio Fran le tira los tejos a Charles.
Así que Charles se queda con cara extraña durante unos segundos, mientras pasa por su cabeza una expresión francesa: ménage à trois.

Con esta nueva amplia gama de relaciones, en las que tus ex pueden llegar a ser tus amigos, tus amantes o tus compañeros de piso, ¿existe realmente una relación de amistad "platónica", que no pueda verse enturbiada por la atracción sexual, los celos o la envidia? ¿Acaso los ex se pueden convertir en amigos, amantes o casamenteros?

Sin querer juzgar ni suponer, Charles continúa con su copa mientras la conversación deriva a otros derroteros.
Cuando ya deciden marcharse, Charles acompaña a su casa a F., pues le coge de camino para llegar a la suya. Ya en la puerta y sabiendo que Andreas está dentro, François invita a Charles a tomar una copa en casa. Charles, recordando el comentario anterior, decide entrar para ver qué pasa, a pesar de tener ganas de llegar a casa.
Nada dentro recuerda la frase ambigua anterior, hasta que, en un momento que Andreas está de espaldas, F. decide mandarle unos besos a Charles, que responde mientras se siente como un quinceañero pelando la pava delante de los padres.
Tras cenar, se marcha a casa, pensando en las cosas sorprendentes que tiene la vida.

My second homework is an e-mail



Es un e-mail a un penfriend, aunque realmente Rad me pidió que se lo mandara a él y es lo que he hecho.




Hi, Rad. How are you?

My name's Antonio and I'm from Cordoba-Spain, but I've lived in Seville since 1996. I'm 29.

I'm a civil servant, I work in the Employment Service.

I study English in an Official School. I speak Spanish and a little English. I want to learn English because I like to travel and i'd like to work in other country.

My family live in Cordoba. My father is retired and my mother is a housewife. They're 63 and 61 years old. I have two brothers. They're 34 and 22. My older brother is married.

I like music, reading and sports. I do capoeira and ride on my bike.I have a blog too. I think I'm a fanatic of cinema.

Write soon,
Antonio Torres


Imagen sacada de www.thamesis.es

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Esta noche he soñado...


... con un antiguo amor. Nos veíamos, hablábamos y quedábamos para salir por lugares nuevos, los que realmente me apetece conocer.
No había el romanticismo de la vuelta, ni sexo, ni una escena de tú-hiciste.
Todo era tranquilo y yo recaía en la ilusión de que volveríamos a recaer. Pero el sueño se quedaba ahí.

Segundo fin de semana de mi cumpleaños

Así que cogí mi mochila y tiré para Córdoba, a seguir celebrando mi cumpleaños. Y es que, si es cierto eso de las fiestas gitanas, hay que aprender de las cosas buenas que tenga cada cultura.

El viernes salí a dar una vuelta, para ver a la gente.

Ya el sábado, al mediodía, nos fuimos a la parcela de mis padres, a comer sardinas y chuletas.














Y el sábado noche, Inma muy amablemente me dejó su casa para hacer una cena y salir luego de marcha. Al final acabamos los dos solos de marcha.










jueves, 22 de noviembre de 2007

Definición (Volver II)

Si hay algo en lo que me puedo sentir maniático es en mi intento por definir las cosas. Y cuando escribo cosas me refiero a sentimientos y a relaciones.
Me gusta saber si ha sido pareja, rollete, amor (así lo defino cuando el sentimiento no ha llegado a pareja), amistad, amante y largo etcétera, que cada cual llamará de forma diversa.
Y es que últimamente por mi vida están pasando antiguas relaciones que ya se han convertido en fantasmas, en zombies que deambulan por mi mente. Alguno me produce tristeza (léase "Quién escribirá historia..." en este mismo mes), otro amistad y otro incertidumbre. Al final me acabo sintiendo como Michael Jackson en Thriller, un zombie bailando entre mis zombies emocionales.

De todos modos hoy toca hablar del fantasma de la incertidumbre, llamado así al ser producto de una relación pasada que no se definió por dos motivos:
El primero, que ni siquiera aún he logrado, viene de su nulidad para hablar de sentimientos, para afrontarlos y definirlos ante el interesado (yo).



El segundo, ya que en toda relación suele haber, al menos, dos personas, se debe a mi propia definición. Voy a explicarme. Ayer Carrie Bradshaw me dio la frase exacta:
Puede que sea eso: lo único capaz de definir una relación sea otra relación

Lo que quiero decir con este segundo motivo fue simplemente que por mi parte había otra relación que definía ésta. Tenía una puerta abierta de una relación que había acabado sin que yo me diera cuenta del final y que aún anhelaba. Me resultaba difícil, por no decir imposible, no comparar ambas relaciones: ahora tenía atención, serenidad y cariño, que antes había tenido en pequeñas dosis; pero ahora no tenía ganas de decir pareja y antes sí.
Así que tenía ganas de tener una relación de pareja con una persona que no estaba, mientras que con otra mantenía una relación que me daba miedo definirle, porque no quería saber cuál sería su respuesta ni si tendría alguna.

Entonces la relación terminó.
Con el tiempo nos hemos definido como amigos y he pedido que me desvelara si en algún momento había definido una relación que yo no me atreví a definirle.
Ahora este fantasma, tras un tiempo de amistad, quiere pasar a otra entidad corpórea que, por mi parte, seguirá denifiniéndose de la misma forma. No ya porque lo vaya a definir a través de otra relación, sino porque acabaría definiéndolo a través de la que tuvimos. Resulta extraño tener la incertidumbre de no saber qué espera de ti la otra persona, si le haces daño con tu definición no verbalizada o si su comportamiento responde a una definición que va más allá de una palabra.

Quizás con esta relación aprenda que hay cosas que no se pueden definir. O a alguno de los dos nos surja otra relación para definir esta.

Volver

Hoy tengo ganas de hablar de una palabra. A mí me ocurre que tengo palabras que son más que una mera sucesión de sonidos y un concepto abstracto. Las he oído o visto y ese contexto ya se les ha quedado grabado. Puedo oirlas o verlas en otros lugares, pero muchas veces se me transforman, a veces, en significados ya conocidos, aunque éstos sean duales o antagónicos.

Y una de esas palabras es 'Volver'.



Fue hace muchos años, cuando mi vida dio y buscó un cambio. Y empecé a leer poesía. Entonces llegó Cernuda. Recuerdo haber comprado un libro en Valencia y también recuerdo que mi madre me regaló "La Realidad y el Deseo" por un santo. Devoré ese libro, buscando y buscando poemas con los que sentirme identificado en un momento en el que mi vida se estaba empezando a definir, al estar dejando la adolescencia (lo que muchos adolescentes hacen entre los 14 y los 20, yo lo empecé a hacer con los 18... tengo mi ritmo). Recuerdo muchos poemas que me iluminaron (quizás suene fuerte, pero es la palabra que mejor lo define). En particular uno fue el culpable de que 'volver' dejara de ser un mero verbo.

Peregrino
¿Volver? Vuelva el que tenga,
Tras largos años, tras un largo viaje,
Cansancio del camino y la codicia
De su tierra, su casa, sus amigos,
Del amor que al regreso fiel le espere.

Mas, ¿tú? ¿Volver? Regresar no piensas,
Sino seguir libre adelante,
Disponible por siempre, mozo o viejo,
Sin hijo que te busque, como a Ulises,
Sin Ítaca que aguarde y sin Penélope

Sigue, sigue adelante y no regreses,
Fiel hasta el fin del camino y tu vida,
No eches de menos un destino más fácil,
Tus pies sobre la tierra antes no hollada,
Tus ojos frente a lo antes nunca visto.


A pesar de ser tremendo, en aquella época sabía hacia dónde no debía volver, que tenía que dejar cosas atrás y que no debería anhelar "un destino más fácil". Entonces el volver interrogante del principio resulta irónico, pues perfectamente todo el poema te afirma en un categórico NO.

Una vez cogida la palabra, era cuestión de tiempo que llegara otro contexto donde resultara significativa. Y entonces escuché el disco-canción Pedrá, de Extremoduro. Se trata de un disco con una única canción de 30 minutos, que yo escuchaba en mi primer piso de Sevilla, en una cinta de casete (la rae la escribe así). Escribo el fragmento:

Por volver como eres,
por volver como somos,
por la inmensa sonrisa de tus cansados ojos,
por volver donde alguien te quiere sin que vuelvas,
por poner a los mios con un poco más de luz.

(un buen rato con música, pues, aunque seguido, cambia el ritmo y el significado)

Cuando su mirada se ha cruzado con la mía.
saltó sólo una chispa y prendieron tantos fuegos,
que se fué la luz del día,
arrasamos los bosques,
también ví como ardían
los nidos en los postes.

Me voy a recortar en punta las orejas
y me voy a echar al monte a aullar entre la maleza,
volver no dudaría, ahora soy yonqui a mi manera,
ya no quiero tu amnistía, puedo morir donde quiera.


Aunque para mí estos dos volver en la canción sean antagónicos, por desgracia nada expresa mejor el significado real de la palabra volver. A veces he sentido la parte romántica, a veces la más dura y, quizás la mayoría, ambas, dando vueltas en mí cabeza.

Después ha llegado Chavela Vargas (Volver, volver, volver, a tus brazos otra vez...) y otras muchas canciones, frases de películas, de libros... que no quiero enumerar, pero de todos modos yo me quedo con estas dos.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

La sombra del friki es alargada



Si hay algo que todavía no termino de entender, por lo sutil del término, es las personas que se pueden considerar frikis por que tengan un determinado hobby.
Por ejemplo, yo llevo varios años escribiendo. Empecé mandando cartas y escribiendo diario, a veces he escrito en cuadernos cuando me ha apetecido, y ahora me dedico a escribir en este blog todo lo que me pasa por la cabeza. Debo pensar que soy friki por escribir en un blog, por escribir en general o, al ser un hobby que no me ocupa nada más que una parte de mi tiempo, que soy una "persona normal".
Hace unas semanas estuve en el Festival de Cine Europeo, donde llegué a ver 25 películas en versión original, y quien vea mi carpeta de películas, puede apreciar que tengo más de 300, clasificadas algunas por directores o temática. ¿En esto se puede decir que soy friki? ¿Acaso más aún que personas que se dedican a ir a ver cine "más comercial" o simplemente personas que se dedican a comprar libros?
Quizás también se pueda pensar lo mismo del deporte. Porque una persona que se sabe todos los resultados futbolísticos del domingo, calcula cuántas victorias necesita un determinado equipo para ganar la liga o no pasar a segunda o, simplemente, se dedica a picarse con el compañero de trabajo sobre si su equipo es mejor que el del otro, si merecía ganar o no. ¿Por qué resulta menos friki una persona así que uno que practica un deporte menos común o simplemente va al gimnasio para hacer máquinas o natación? Creo que es aquí, donde existen aficionados pasivos y activos, donde se ha hecho incluso un ranking de los distintos deportes, en función de el número de seguidores que tiene como forma de una mayor aceptación social.
Porque el principal problema que puede tener una persona para saber su grado de frikismo es el grado de aceptación que sus aficiones tienen en la sociedad. ¿Acaso no se mide en la norma general el grado de frikismo de la minoría?

Ante este conjunto de preguntas sin respuestas me reivindico en hacer lo que me dé la gana, que es lo que cualquier persona debe hacer.

Para más información sobre frikis:

http://es.wikipedia.org/wiki/Friki

y sobre el poster, está sacado de:

http://www.alvarezperea.com/diaorgullofriki/index.htm

Fotos de mi cumpleaños (primera parte)

Sábado 17 de noviembre, sobre las 9 de la mañana.








Sábado 17 de noviembre, 11 de la noche.








Martes 20 de noviembre, durante la tarde-noche, donde todos mis amigos llegaron a partir de las 7'30, pues el tiempo no acompañaba (alerta naranja por las lluvias, ni más ni menos), tomamos tarta, licor, unos lomitos a modo de pepito (porque había que tener algo fácil de preparar por si alguien se quedaba a cenar, y todo el mundo lo hizo) y un cubatita para después. La verdad que fue una noche de cumpleaños íntima y divertida.











Para ver el resto de las fotos:

http://anthonytowers.spaces.live.com/

martes, 20 de noviembre de 2007

Reflexiones en el día de mi cumpleaños

(que no es lo mismo que Reflexiones tirá en la pista de baile).

Realmente los alrededores del cumpleaños, junto con el periodo fin de año, suelen ser los momentos más propicios para realizar comparaciones sobre tu vida, hacer propósitos que luego no se van a cumplir y caer en un estado de depresión o alegría, en función de cómo hagas tus reflexiones.
Para empezar, éste es mi primer cumpleaños como funcionario, en un puesto de trabajo que me gusta bastante y que me permite, además de ayudar a personas desempleadas, poder, por ejemplo, estar escribiendo estas líneas.
Ya el año pasado estaba contento porque sabía que para estas fechas ya estaría con un trabajito fijo, el que me había currado tras varios años estudiando (a ratos), compaginándolo con un trabajo intermitente; que me obligaba a cambiar mi domicilio entre Sevilla y Córdoba (gracias a mi padre, que tiene paciencia y me ayuda en todas las mudanzas).
Por lo menos ya sé que en los dos próximos años viviré en Sevilla, ahora mismo con Antonio, en su casa, y en un futuro no sé si seguiré aquí.
Por que ya hasta el gobierno, de una forma indirecta, va diciendo que las ayudas de alquiler son para menores de 30 años. Que si llegas a los 30 sin casa propia eres un pardillo que no merece ayuda ni ná.

Me estoy volviendo más exigente respecto a las personas que conozco, pues me gusta rodearme de la gente que realmente me merece la pena, que me puede aportar algo. Muchas veces me río de esta cualidad o defecto que estoy cultivando, pues en el fondo tiene algo de delirios de grandeza propios de un funcionario con plaza recién adquirida. Y es que quiero tener pareja de nuevo, pero no tengo ganas de volver a caer en los mismos errores del pasado; y eso que en aquellos tiempos se trataban de casos en los que la intuición me decía que podría funcionar y que merecía la pena luchar (la verdad es que esto último fue cierto, mereció la pena). Quizás lo que me falla es la intuición, que me hace caer en errores y no me deja conseguir aciertos.

Con los años, además de tener cada vez menos pelo, me estoy volviendo algo más dormilón, pero con más energías. Me gusta cada vez menos la inactividad, por lo que tengo que buscar actividades extralaborales que realizar por las tardes.

En muchos aspectos me siento extraño, un poquito perdido. Y es que parece que tengo que hacer algo en mi vida, pero todavía no sé el qué. Por ahora me dedico a disfrutar y esperar a ver si aparece una señal (del cielo) que me dé alguna pista.

Yo sigo igual, sigo tal cual, quizás desmejorado.




Pues hoy es mi cumpleaños, que ha empezado, tras mi rápido desayuno en casa, con la espera del autobús bajo la lluvia. Y es que con una garganta inflamada no es muy buena idea coger la bicicleta y llegar al trabajo sudado. Y encima, con la lluvia tan fuerte, suena aún peor.

















A pesar de poder escuchar música, el calor que puede hacer en un bus lleno de gente y el agobio que pasas intentando no pegarle un codazo en la cabeza al de al lado, hace que no sea muy agradable el viaje.
Además, si la espera ha supuesto mojarme un poquito, la salida del bus ha supuesto que el pantalón esté totalmente mojado, no hasta las rodillas, sino hasta la cintura. Menos mal que un compañero de trabajo, que vive cerca, me ha traido un pantalón seco.

La parte positiva es que esta mañana me he levantado con dos sms's de mis abogadas favoritas, he recibido varios mensajes y e-mails, e incluso a estas horas ya me han llamado.
Y a las 5 haré cafelito en casa, para quien quiera compartir esta tarde de lluvia.

Nota: La foto del cigarro está robada del blog de Ángela y es del día 31 de octubre. La otra la he añadido el 21, pues la foto es de la noche del cumpleaños.

Primer fin de semana de mi cumpleaños

Ya he empezado a celebrar mi cumpleaños. Lo mío ya se ha convertido no en una fiesta de cumpleaños, sino en varias fiestas de cumpleaños.
Este año cae en martes, por lo que tengo que pensar que un fin de semana tengo que celebrarlo en Sevilla y otro en Córdoba; y el propio día también hay que hacer algo, ¿no?

Pues ya el viernes salí de marcha, aunque fuera a las 4 de la mañana para ir directamente a la Domm con Rosalía, Pili, Mari Carmen e Isa. Al estar rodeado de chicas, fue gracioso ver como los buitres más patéticos de la discoteca revoloteaban alrededor a pesar de ser ignorados y rechazados. Pero tenían moral.
El mejor momento: le estoy encenciendo un cigarro a Rosalía y un moscardón sopla... Tuvo su momento segurata, con cara de mala hostia y todo. Como se nota que es profesora de secundaria.

Y el sábado hice una cena. Mi fallo fue que, aunque pensaba en hacer algo, hasta el mismo día no me atreví a asegurárselo a nadie, por lo que hubo gente que sólo pudo pasarse un ratito. De todos modos la mayoría esperaban que hiciera algo y vinieron con ganas de una buena cena... y fue lo que tuvieron (no pongo el menú porque la envidia puede ser muy mala). Así que volví a salir de casa para irme directamente a la discoteca. Esta vez, al no tener coche, tocó ir al Ítaca, donde realicé, además, algo que llevaba tiempo con ganas de realizar.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Todas las fotos

Estoy empezando a poner las fotos en mi espacio, de hotmail. Doy a dirección:

http://anthonytowers.spaces.live.com/

jueves, 8 de noviembre de 2007

En la bici con Barbra

No sé que me pasa esta semana pero cada vez que me monto en la bici se me mete en la cabeza la canción de People:

People
People who need people
Are the luckiest people in the world

No sé si será porque no el ritmo de la canción me viene bien para ajustarlo al ritmo que deben llevar mis piernas para no cansarme y no atropellar a la multitud de peatones que les gusta andar por el camino de color verde, cual Judy Garland daltónica.

También puede ser un efecto secundario del Festival de Cine Europeo, donde las películas, aunque no llegan al discurso final de Morir (o no), hablan sobre personas, sobre cómo éstas interactúan, cómo se ayudan o cómo se fastidian.

La cosa es que me monto en la bici y me viene la cancioncita, que me da muy buen rollo y me hace incluso balancearme al ritmo de la música.

Quién escribirá la historia de lo que puedo haber sido

Siempre que escucho esta canción me acuerdo de ti. Y es que la primera vez que la escuché ya te la ajusté como si fuera un guante.
Hoy vuelvo a evocarla tras volverte a ver y volver a encontrarme con tu frío y mi tibieza. Porque lo que siento no se puede llamar amor, sino más bien un cariño y un recuerdo. Un recuerdo de un tiempo en el que la felicidad era derramada en abundancia y todo tenía la belleza de lo efímero. Soy Adán añorando el paraíso.
Ahora vuelvo a verte y quiero volver a verte. Pero yo me quedo, como ya he dicho antes, en un gesto tibio que creo entiendes y tú, parece, no haces nada para animarme a que cambie la temperatura.

Todavía dudo si tus circunstancias fueron las verdaderas razones de que te fueras sin irte, que me descolocaras y tú acabaras yéndote mientras yo me quedaba. Sigo pensando en el momento que te fuiste, si fui yo quien acabó echándote; si cuando volviste a Sevilla no volviste realmente por que no me habías perdonado.
No sé si has pensado alguna vez en continuar por donde nos quedamos, a pesar de haber cambiado ambos y de que la visión que tenemos el uno del otro pueda estar distorsionada por tanto malentendido.
Ya sabes que las cosas que nunca se dicen suelen ser las más importantes y nosotros no hemos aclarado ni aclararemos nunca lo que realmente pudo pasar. Yo tengo una versión de las cosas que posiblemente pueda chocar con la tuya, pero seguramente no lo compruebe nunca.

Porque en el fondo de todo, si el amor, el deseo o la atracción fueran una persona viva lo que yo siento hacia ti se parecería a un muerto viviente, que lo despiertas de vez en cuando y se dedica a dar un paseo por mi cabeza antes de volver a su tumba. Y si tiene algo de sentido todo lo que estoy escribiendo es simplemente porque me jode mucho pensar que ese muerto posiblemente no pueda resucitar nunca aunque quisiéramos intentarlo, que el paraíso se quede en perdido, que nunca llegue a saber lo que pudo haber sido.

lunes, 5 de noviembre de 2007

Time goes by...



¡¡¡¡ Tengo que celebrar que ya, desde ayer día 4, tengo un trienio!!!!
Ya se me van viendo las arrugas (y más si tenemos en cuenta que a finales de este mes es mi cumpleaños), me estoy volviendo más perro y mis desayunos suelen durar media mañana, jajajaja.
No, que es broma. Sigo siendo el mismo de siempre aunque en tres años me ha dado tiempo de conocer la administración por dentro, de dos organismos bastantes distintos.
La verdad que ha llovido bastante desde entonces y eso que cuando entré a trabajar en la administración fuera de rebote, sin plantearmelo siquiera (gracias, Javi). Desde que empecé me di cuenta que esto es lo mío, y me he dedicado a estudiar, a veces como un loco y a veces por que tenía que hacerlo. Ahora puedo decir que soy funcionario, mi sueldo es una mierda y no tenemos la revisión salarial del IPC que tienen el resto de trabajadores. Pero es lo que quería hacer desde que en el 2004 dejara la empresa privada ya para siempre.
Y ya han pasado 3 años, compaginados con momentos en el paro. En ese tiempo he tenido parejas, amantes, rolletes. He vivido en varios pisos, con distintas personas. Tengo amigos nuevos y algunos que se han ido quedando en el camino, aunque la mayoría siguen estando allí.
Y ante todo he disfrutado con mi trabajo. Y he sido feliz.
Dibujo sacado de la página:

miércoles, 31 de octubre de 2007

La paz está en las matemáticas...


... que no quiere decir que esté en los matemáticos. Eso, claro está, si se me puede considerar matemático (una vez un chico me dijo que yo no era matemático, pues no me dedicaba a inventar fórmulas. Sé que su comentario no debería tenerse en cuenta, pero a pesar de no saber explicarse algo de razón sí que tiene).

La cosa es que últimamente me estoy volviendo más guerrillero (quien me conoce bien sabe que me gusta meter caña... dialéctica, claro) y no sólo porque sea Scorpio y nuestro planeta regente sea Marte; sino porque ya me cansé del Pilates y el Batuka y me he metido a hacer capoeira y taekwondo (esto último sólo por un mes, que hay que volver a las oposiciones y la pela es la pela). Estaba ya harto de tanto ejercicio pasivo (sin comentarios) y hay que empezar a dar caña.

De todos modos, la culpable de este cambio de actividades extralaborales es Arwen, cuya foto ha sido cedida amablemente por ella.
No es que tenga todavía mucho arte en el manejo de mi cuerpo, como el que se puede apreciar en las fotos publicadas en el blog de ella, pero espero con el tiempo tener al menos algo más de soltura. Por ahora me conformo con no tener más ampollas en los pies y que no me salgan muchas agujetas en las piernas.

lunes, 29 de octubre de 2007

Teoría de grupos

Ayer estuve en la Alameda de cervezas, tapeo y posterior café con licorcito. Es el lugar dónde mejor me siento para pasar un día o una noche. Y es normal, estoy rodeado de gente que pertenece a mi "grupo".

¿Estamos realmente en un sociedad en la que nos dejamos agrupar? ¿Existen realmente las clases sociales en planos ya no sólo económicos, sino en sectores diferenciados por la forma de vestir, los gustos musicales o las preferencias en el ocio?

Si miro a mi alrededor cuando estoy sentado en un bar las mesas suelen estar ocupadas de un mismo grupo de personas, vestidas de un mismo estilo, con unas inquietudes parecidas, gustos similares. Eso es lo que podemos ver, lo que me trasmiten.

Cuando nos presentan a una persona o miramos simplemente a alguien empezamos irremediablemente a ver su ropa, su expresión corporal y todo lo que pueda trasmitirnos su cara. De todo esto empezamos primero a catalogarlo en un grupo, a ver por dónde le gusta "moverse", qué música le gusta escuchar y su forma de pensar grosso modo.

Pero, ¿seguimos esa pauta por comodidad, por selección o simplemente por costumbre?

Quizás la única respuesta que contradiga todo esto es buscar en nuestra mente esos amigos que claramente forman parte de otro grupo, que tiene unos gustos en muchos aspectos distintos a los nuestros, que no les gusta ir a los mismos bares que nosotros o que simplemente no podemos quedar con ellos para una gran cantidad de cosas que hacemos en nuestro tiempo libre.

Y precisamente a esto me refiero. Me pregunto si esos estereotipos que nos vamos creando son ciertos y si realmente son importantes tenerlos en cuenta a la hora de seleccionar con quien queremos pasar el tiempo o si deberíamos dar oportunidades a toda persona que tengamos delante, aun cuando todo su exterior te da a entender que no vas a tener nada en común.

Muchos de mis amigos, si sigo los estereotipos, estarían fuera de mi grupo. Con ellos comparto una serie de cosas y muchas otras las tengo que buscar al amparo del grupo. Y no ocurre nada.

Pero podemos rizar el rizo y complicar todo este baturrillo aún más: ¿Acaso no ocurre lo mismo, incluso más ampliado, cuando lo que buscamos es una pareja?

Nos fijamos primero en aquell@s que entran dentro de nuestro grupo, es lo que definimos como nuestro "tipo". Simplemente por una forma de vestir nos resulta más o menos apetecible una persona. ¿Es un gusto estético al que le adjuntamos una forma de ser y unas inquietudes? ¿O es peor aún y nos dejamos llevar solamente por las apariencias?

Festival de Cine Europeo de Sevilla

El viernes 2 de noviembre empieza el Festival de Cine.
El año pasado sólo pude ir en dos ocasiones:
Una noche de miércoles, tras salir de trabajar. Resultó que todas las películas estaban agotadas salvo un documental sobre política italiana en los años 80, que estuvo todo lo entretenido que puede estar un documental a las 10 de la noche sobre ese tema.
Y un sábado en el que pude entrar a las películas que buenamente no quedaron sin entradas. Una rusa, una griega y una belga, las tres bastante buenas, por cierto.

Pero este año voy a resarcirme. Como vuelvo a ser estudiante en mis tardes, tengo el abono-27 y ése es el número de películas que voy a ver en esos 9 días, sin contar los pases de prensa a los que acudiré. Es lo que ocurre cuando quedan 3 personas para hacer una puesta en común de las películas "preferentes" y notas que tener gustos distintos implica que se van metiendo películas que no te habían llamado mucho la atención, aunque seguramente puedan llegar a gustarte.

De todos modos ya lo comentaré si no me han ingresado en un psiquiátrico.

martes, 23 de octubre de 2007

Lost and Found

Quiero ser Santa
quiero ser beata

Lo que voy a exponer a continuación demuestra que puede llegar a compensarte ser buena persona, o al menos intentarlo.

La semana pasada llevaba varios días buscando una serie de cosas: unos pantalones, mis "pequeñas" gafas de sol graduadas y la luz de atrás de la bicicleta. Ya ayer terminé de encontrarlas.
Tras haber mirado por toda la casa, pensé que había dejado puesta la luz y me la habían quitado; pero la desaparición de las otras dos cosas era más extraño, pues las gafas sólo me las pongo para ir al trabajo y los pantalones... son difíciles de extraviar por la calle.

Pues ayer estaba en la biblioteca con mi Constitución Española y una chica le pidió a la amiga un pañuelo de papel. La amiga, que estaba con los tapones, no se enteraba de nada. Y yo, como buen samaritano, me puse a buscar en el bolsillo pequeño de mi bolso gris, donde no encontré clinex, pero sí la luz trasera de la bici.

Me sentí tan bien, más incluso cuando la muchacha de enfrente pudo limpiarse pues la amiga se quitó el tampón, escuchó el pedido y le dio un pañuelo.

sábado, 20 de octubre de 2007

Fotos de septiembre

Estas fotos están hechas a principio de septiembre, aprovechando los últimos días de piscina, de mi piscina.
Un sábado se vinieron Ana (la que está en la piscina conmigo) y Lola a pasar el día. También hice fotos de mi mini-yo o hermano pequeño y mi madre.















Otra foto es de mi amiga Pili, el día de su vuelta de las vacaciones. Llevaba dos meses sin verla y ya tenía ganas de estar con ella.







Lo que queda entre medias es la entrada "Sábado noche" de septiembre y una foto de la culpable de que haya cambiado de gimnasio, pero esto ya lo pondré en otro blog.








Ya sólo me quedan dos bloques de fotos más.
El primero es de la inauguración del festival Utopía, que aprovechó toda córdoba para darse un paseo por la Corredera y medio casco antiguo. Muchos de mis amigos estaban allí...



Ya las últimas fotos son de una visita de Eva a Sevilla, el viernes fue la noche de los museos y nos fuimos los cuatro de cultureo.















... Y el sábado de marcha, aunque ya sin Eva.