viernes, 2 de mayo de 2008

Cuerpos bajo el sol




Que fue lo que hizo la media España que no se fue de manifestación, viendo las retenciones de tráfico que había por todos lados. Además decidimos ir a Cuesta Maneli, playa situada entre Matalascañas y Mazagón, en pleno parque de Doñana.


Primer problema: se acerca la romería del Rocío y tenemos que pasar junto a la hermita, por lo que había rocieros que iban para sus casas en la aldea.
Segundo problema: es inicio de puente y con el buen tiempo que no hemos podido disfrutar, por ejemplo, en semana santa.
Tercer problema: a la guardia civil le da por hacer controles, al menos a las 11 de la mañana y a las 7 de la tarde, con el consiguiente atasco propiciado.

Así que nos encontramos con un trayecto de menos de 1 hora realizado, tanto a la ida como a la vuelta, en 2 horas y media. Pero entre el charloteo y la música se nos hace, la verdad, ameno.
Y llegamos a la playa, tras andar más de un kilómetro por una duna, sobre un camino de madera.
El cielo es del azul que sólo puede tener cuando está cerca del mar y sin una nube. El viento no es nada molesto, ni refresca ni trae calor. La playa se va llenando de personas. Y el agua está muy fría.


Llegamos con el hambre que da el viaje y la propia playa, y comemos casi antes de ser las dos y seguimos hablando mientras que a nuestro alrededor empiezan a llegar grupos numerosos de veinteañeros (aunque yo todavía lo sea, a éstos les saco más de media década); y lo que prometía ser una playa desierta se va convirtiendo en una zona de botellón.
Por supuesto que acabamos haciendo el habitual paseo, en el que me quito las gafas de sol graduadas, para no tener señal, con el consiguiente despite al no distinguir a nada ni nadie de mi alrededor, pero sintiéndome más cerca del sol. Y descubrimos que, llegando a la playa, hay que elegir irse para el lado izquierdo, dirección Matalascañas, donde la playa, por ser nudista, está mucho más tranquila y es mucho más limpia. Y que conste que si no fuimos a esa zona fue porque las niñas con las que iba no querían ir.

De todos modos tuvimos lo mejor: la tranquilidad, el sonido del mar, la brisa. Y todos los cuerpos bajo el sol, en reposo, calentándose.

5 comentarios:

Isabel Sira dijo...

Al menos una de las niñas que iba contigo ya te ha dicho que apoya tu moción de tirar para el otro lado, pero que ella se queda con su bikini puesto...
Por cierto, ¿no sabes lo que es no dar publicidad de una playa para que no se masifique? jajajaja

anthonytowers dijo...

Te tomo la palabra para el mes de junio. Por cierto, ¿qué tienes que hacer este fin de semana? Viene Inma, así que si contamos con ella, Luisa, Pili y tú ya hacemos un coche... Si viniera más gente pues mejor, ¿no?
Creo que voy a mandar un colectivo.
Y, por cierto, casi nadie lee mi blog.

Isabel Sira dijo...

Este fin de semana no puedo. Ahora mismo no recuerdo por qué, pero sé que lo estuve pensando y tengo algo que hacer, sorry...
Ya hablamos

Kin El Bravido dijo...

¡Mentira! Yo lo leo...no me puedes dejar tirado...

Eso sí, si tienes pocas visitas convence a tus amigas para que tiren para Matalascañas y no te separes de la cámara y verás como sube el contador.:D

anthonytowers dijo...

Jajajaja, lo he pensado, aunque creo que dejaría de tener amigas, así que no puedo hacerlo. Y tomar fotos de otras personas roza lo ilegal, junto con la fama de pervertido que cogería (que no es bueno que lo piensen los que no me conocen).