miércoles, 23 de enero de 2008

El viernes de Dolores

Aunque si les hacemos caso a los Martes y trece podríamos empezar diciendo "viennes de dolores", para acabar con la imagen de una persona que se acerca toa' doloría.



Bueno, intentando no hacer malos presagios, puedo decir que esa es la fecha tope para la entrega de llaves de mi primer pisito. Y sí puedo decir que es un presagio mariano, que ya añadimos a la dirección, la barriada y la zona. Si se dice que a todos los tontos se le aparece la virgen, creo que conmigo se va a quedar a vivir.

Por lo pronto sólo me queda ir al notario a firmar las escrituras, cosa que ocurrirá aproximadamente en un mes. Después empezaré a ver si hay que hacer pequeños cambios de enchufes y cosillas varias; antes de que mi hermano venga a pintar el piso, mientras mis padres y yo nos dedicaremos a hacer una limpieza profunda (familia unida).
En resumidas cuentas, para abril seguramente esté instalado y divinamente hipotecado. Prometo poner fotos del piso.

Nota: No explico mejor la dirección porque hay mucho psicópata suelto por la red, y uno está muy güeno.

Foto recogida de http://www.corto.tv/main.php?g2_itemId=3145

Los lazos del instinto


Es lo que yo entiendo que realiza el sexo entre dos personas. No sé dónde he escuchado que el sexo es una forma de conocer gente. E incluso de realizar un tipo de unión que no se puede crear mediante conversaciones o experiencias compartidas.
El sexo es una divertida forma de pasar el tiempo, es algo que nos une a otra persona y nos hace disfrutar.
Pero no es solamente eso. Y no solamente puedes buscar a una persona para realizar el acto.
Puedes tener sexo con una persona a la que quieres, a la que amas, con la que tienes una afinidad o simplemente que te atrae. Y puede ser maravilloso o decepcionante (al fin y al cabo, la famosa caja de bombones de Forrest Gump se puede aplicar a la futura pareja sexual).
Y no solamente tiene importancia el acto en sí, pues acabas teniendo prerrogativas que no alcanzas en las relaciones no sexuales. Una mayor atención telefónica, ayuda en los momentos difíciles, una intimidad diferente, distinta complicidad, coqueteo...
Y todo ello muchas veces con personas que conoces de poco tiempo, o con las que perdiste el contacto y lo recuperas de golpe.

lunes, 21 de enero de 2008

Y nos fuimos a Berlín



... a comernos las uvas. Se probaron, como no, unas cuantas salchichas y unas cuantas cervezas. Todo en sentido colinario, pervertid@.
Lo primero que te impresiona es la oscuridad en que están sumidas las calles, junto con la falta de personas humanas a las 11 de la noche.
Así que estás en una ciudad de más de tres millones de habitantes, con una tranquilidad que resulta pasmosa si lo comparas con el ruido y el estrés de ciudades españolas mucho más pequeñas (de Madrid ya ni hablamos).



Me gustó la ciudad, muy bien comunicada y donde pasear es un disfrute. El fin de año fue espectacular, con toda la ciudad dedicada a lanzar fuegos artificiales para celebrar el comienzo del año.

Y levantarse el primer día del año con una tormenta de nieve (y sin resaca).


Lo que más me impactó fue el monumento al holocausto, del que tuve que salir a los 5 minutos, ...




... y que la gente en las discotecas empujan mucho y por la calle, si tienen que decirte algo, te sonríen.


Por lo demás, los berlineses no son todos altos, con los ojos azules y guapos. Haberlos, haylos, pero muy pocos. En cambio, las chicas son algunas realmente guapas, nada que ver con la Elsa-bailarina que sale en Cabaret (en el número de Money).
Y quien quiera saber más, que coja un avión.





NOTA: He retocado las dos últimas fotos, por petición de la persona que iba a salir...

lunes, 7 de enero de 2008

Otro año más


Y vuelvo a escribir, tras unas semanas en que las fiestas me han impedido escribir al no tener un ordenador cerca.
Si tengo que pensar en este fin de año y compararlo con otros anteriores, lo primero que me viene a la mente es que éste es sin duda el que tengo más dudas y mayor inestabilidad emosional de todos.
Tengo dudas sobre dónde voy a vivir en el próximo año. A veces me entra miedo sobre lo que se me puede venir encima en el caso de comprarme definitivamente la casa, una atadura para mi libertad de movimientos hasta la fecha (salidas de copas y tapeo, compra de libros, viajes por Europa...) y una pequeña ancla a la hora de imaginarme viviendo en otra ciudad (que una vez que tienes tu casa, con tu super hipoteca, no te vas a ir a otra ciudad de alquiler).
Y para colmo están los propios bancos que me miran con cara de pirado al ver mi nómina, que por muy fija de funcionario-para-toda-la-vida, es más triste que Falete en Naturhouse (comparación escuchada a Patricia Conde). Vaya, que hacen todo menos hacerte pensar que puedes tirar pa'lante, por muchos apoyos paternos y opciones de ascenso que les expongas.
La cosa está por ver aún. Espero a mañana y a lo queda por venir del mes para poder saber si al final doy el salto y me hago hipotecado, renuncio al gimnasio y a algunas de las salidas que hago al cabo del mes o sigo siendo un alquilado más y me pido la ayuda del gobierno, hasta noviembre (que cumplo los 30).

Sobre mis sentimientos resulta más complicado hablar y más si tenemos en cuenta que a veces te encuentras con personas que parecen darte a entender que tu vida no avanza o no va por el camino que debería.
Sinceramente me resulta extraño comprobar que ya van varias uvas que me como sin tener pareja, lo cual resume bastante bien mi vida sentimental en estos últimos años. A esto se une que he tenido en los últimos años solamente amagos de relaciones y prácticamente nigún rollete de una noche, lo cual me hace plantearme muchas cosas sobre mi persona; en un momento en el que me interesa más la bajada de euribor y si realmente acabará desinflándose la burbuja inmobiliaria. Además de los hechos, si te encuentras con una persona que te mira con cara rara por contarle cosas sobre tus fantasmas, de los que no te preocupas, pero de los que hablas por formar parte de tu vida...
Mi vida personal está tendiendo a la realización de logros personales y al disfrute compartido con mis amigos, a la espera de la persona que me haga volcarme en ella, que llegará cuando sea el momento. Que, reinterpretando a Freud a mi manera, sublimaré el sexo durante el tiempo necesario para cumplir mis objetivos.

Fotografía realizada en el Pergamon Museum.

jueves, 20 de diciembre de 2007

For every sin, I'll have to pay

For every sin, I´ll have to pay
I´ve come to work, I´ve come to play
I think I´ll find another way
It´s not my time to go
(Die another day, Madonna)

Pues ya está hecho, he encontrado un piso en una semana que me ha parecido bien de precio y he dado el salto. La dirección... el título se explica en la dirección.
Ahora busco hipoteca, que es algo que no entiendo. Con el mismo diferencial, ¿cómo puede haber tanta diferencia de cuota?
Bueno, seguiré contando.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Close the door, please

Que se puede traducir como voy a pegarte con la puerta en las narices, gili------. Y es que a veces tienes una rendija abierta para que se ventile la casa (nada que ver con tener la ventana abierta del blog anterior), que hay que airear de vez en cuando las sábanas, piensas que esa rendijita que te abrieron, ya que tú no la buscaste, puede refrescarte y resulta que todo es imaginación tuya, que lo que ha estado pasando ha sido un intento fustrado en un momento de confusión mental, quizás propia de la "edad".
Ahora me encuentro con la nariz un poquito dolorida y con la mala leche propia de los deseos reprimidos. Y pensé que el sábado sería la hora de resarcirme.
Pero no voy a ir en contra de mi naturaleza por un simple portazo, así que el sábado me dediqué a hacer lo que me apetece: bailar y reírme de la vida con mis amigos.

viernes, 7 de diciembre de 2007

El chiste...

Niño, abre la ventana que entre el Fresco.
Y el Fresco se llevó el televisor, el vídeo, el microondas...

... y la moraleja

Cuando tienes una ventana o una puerta abierta, entra el fresco. Puede que eso quizás no haga que te acaben robando nada, aunque muchas veces te encuentras que ha desaparecido una parte de ti. Ves que por tu propia culpa se han llevado trocitos de tu persona que no vas a recuperar y acabas notando que tienes corrientes internas que te van desestabilizando de una forma sutil.
Te das cuenta que el tiempo ha sido perdido, sin posibilidad de volver a recuperarlo. Has estado con el cuerpo cortado, con tiritera. Tu estima se resiente al descubrir que has actuado de forma inconsciente.

E intentas de alguna forma recuperarte, volver a ser tú de nuevo, tomando nota de lo ocurrido para que no vuelva a ocurrirte. Así que te pones manos a la obra, te esfuerzas por cerrar la ventana y dejar que la calefacción vuelva a reconfortarte.

Hacer dinero (es tu tarea)


La canción de Amparanoia tiene razón. A partir de cierta edad es lo que tenemos que hacer. Nos planteamos buscar un trabajo, no sólo para sentirnos realizados como personas, sino porque necesitamos unos ingresos para poder tener una casa, comer, salir, comprar ropa, libros, etc.
Ya desde pequeños nos preguntan qué vamos a hacer, no sólo porque eso ya nos identifique como personas, sino porque debemos trabajar para ganar dinero.


Se dice que no es más feliz el que más tiene, sino el que menos necesita. Por eso se puede decir que hasta ahora el dinero no me ha quitado la felicidad, porque con mis ingresos tenía cubierto no sólo mis necesidades, sino los pequeños caprichos que me pudieran ir surgiendo.
Pero ahora eso ha cambiado.
Tengo que cambiar de piso para el verano. Hasta ahora he compartido piso y siempre he tenido la suerte de hacerlo con algún amigo. Ahora, a punto de cumplir los treinta, me encuentro en la tesitura de tener que elegir entre buscar piso acompañado con un extraño o buscar algo por mi cuenta. Si acepto lo primero, me encontraría con la posibilidad de estar incómodo en mi casa. Por lo que he decidido lo segundo. Y entro en el juego peligroso de necesitar más dinero.
Apoyado (o instado) por mis padres, empiezo la vorágine de buscar piso para comprar. Y las cosas entonces se hacen cuesta arriba. Tengo el apoyo económico de ellos para lo que vaya necesitando. Tendré, por supuesto, que recortar gastos y buscar, seguramente, otra fuente de ingresos como un alquiler o, incluso, un segundo trabajo.

Entrar en esa dinámica supone un cambio que me produce pavor a ratos, pánico en otros momentos e indiferencia cuando pienso que dios aprieta, pero no ahoga.
Hago cuentas y más cuentas, me siento como el señor Scrooge de "Cuento de Navidad", intentando contar los futuros ingresos, a repartir entre la futura hipoteca, la comida y el resto de mi vida. Pienso en mis clases de inglés, en la posibilidad de poder seguir pagando un gimnasio, en estudiar la promoción interna o cualquier oposición que me hiciera ganar más dinero; para todo ello intentar compaginarlo con la opción de volver a trabajar en una academia o dando clases por mi cuenta.
A veces hasta bromeo con la idea de buscar pareja, no ya por todas las cosas bellas que tiene el amor, sino por tener alguien que me ayude con la hipoteca.

También están los consejos de la gente, que muchos a mi alrededor ven lo más normal comprar un piso y tener que sacar dinero como sea. Así son las cosas, un mileurista es lo más normal del mundo en nuestros días, y una hipoteca que sea más de la mitad de la nómina a pagar en 35 años, ahora no sólo no sorprende, sino incluso pensar que algo no anda bien es un pensamiento estúpido.
Hay quien me aconseja comprar piso para alquilar habitación o trabajar por las tardes, para estar durante varios años teniendo un piso que sólo pueda disfrutar para dormir.
Todo se vuelve confuso cuando pienso en las posibilidades que tengo en un futuro no tan lejano. Si acabo entrando en el mundo del adulto plenamente integrado, con hipoteca, quiero decir; espero que las cosas vayan hacia algún lado.

Foto sacada de:
http://www.masternewmedia.org/es/2007/02/11/monetizar_el_contenido_online_como.htm

lunes, 3 de diciembre de 2007

You have to understand the way I am

el amor es una aventura
por eso es mejor bailar



El sábado ordené mi habitación. Ya iba siendo hora, tras casi un mes en el que solamente he hecho pequeñas organizaciones, pero sin llegar a dejarlo totalmente ordenado. Además, he cambiado las bandejas para cartas (ese es el nombre que tienen en el idea) y he puesto la miniatura en madera de edificios londinenses que me han regalado por mi cumpleaños.
También he limpiado el resto de la casa, todo sea por estar durante esta semana en un ambiente que trasmita armonía y equilibrio.
Y es que el viernes empecé a leer algo sobre Feng Shui, pues hace años leí un libro que no pude terminar. De ese libro recordaba que es el dormitorio el lugar de la casa donde se reflejan las relaciones personales. Así, en vista del pequeño caos en el que tenía metido mi habitación, lo mismo está repercutiendo a la hora de conocer “posibles parejas”. Y, sobre todo, ya va siendo hora de volver a poner orden en la habitación.
http://es.wikipedia.org/wiki/Teor%C3%ADa_del_orden
Una vez hecho el orden, aunque las vibraciones no me hicieran ligar, en el caso de ocurrir la otra persona no correría asustada, que ya es algo.
Así que el sábado noche salí a la calle con un nuevo halo, como si acabara de aparecérseme la Virgen María o convertirme en Super-guerrero. Y es que quiero empezar a salir con el chip cambiado, bailar mientras pongo mirada seductora. El Feng Shui puede ayudarme, una vez que tenga la actitud y no me avergüence de mi habitación, el resto es cuestión de tiempo.





Con estos ánimos, empecé haciendo botellón controlando a mi alrededor, tipo suricato, cualquier movimiento, en busca de una posible presa. La conclusión es que la gente de mi edad no suele hacerlo, lo que me puede hacer sentir un poquito fuera de lugar, rodeado de chavales de, como mucho, primeros de carrera, mientras yo me preocupo de si me desgravan el suficiente irpf para que el próximo año no me cruja hacienda.
Bueno, aunque ya tenga menos pelo, por lo demás soy una versión mejorada del Antonio que empezó la carrera hace ya unos añitos, por lo que tampoco tengo que preocuparme salvo que al niñato de al lado se le ocurra tirar una botella para parecer el más guay de la clase y yo acabe con 10 puntos en el hospital.
Tras el botellón, con unos cuantos grados más de alcohol en sangre, toca discoteca, donde ya puedo “relacionarme” con gente de mi edad. Menos mal, pues ya estaba empezando a sentirme en un vídeo de Rebelde Way. Ya en la discoteca empieza mi mayor problema para ligar: la música.
Si la música es buena, me pongo a bailar y llega un momento en el que me abstraigo, con lo que no hay nada que hacer, el suricato deja de mirar a su alrededor y empieza a moverse. Pero si la música es mala, la cosa es aún peor, pues pongo cara de perro, primero mirando al pone-discos de turno, para dejarla como look personal.
Este sábado la música era bastante buena para mi gusto (o mi nivel de alcohol demasiado alto), por lo que no paré de bailar en toda la noche y mi capacidad de observación se fue mermando a medida que pasaban las horas (y bebía más). Mis intentos de concentrarme a mi alrededor no dieron el resultado que yo esperaba, pues no conseguí mantener la vista fija en nadie que no fuera el grupo con el había entrado en la discoteca.
De todos modos, si los consejos del Feng Shui son ciertos, el segundo paso que tengo que cumplir será desechar los delirios de grandeza propios del funcionario recién nombrado.

Respecto al Feng Shui hay miles de entradas, yo he leido de estas dos:

http://www.estiloyhogar.com/soluciones/fengshui/index.cfm?pagina=soluciones_fengshui_006_006

http://www.innatia.com/s/c-feng-shui-gratis/a-conquistar-amor.html
y la foto del suricato está sacada de wikipedia:
http://es.wikipedia.org/wiki/Suricata_suricatta

viernes, 30 de noviembre de 2007

Esta semana



Esta semana no he tenido tiempo para pararme a descansar. No he dejado de hacer cosas, todos los días de un lado para otro. Entre estudiar inglés e ir al gimnasio, no he tenido nada más que unas horas para mí.
He empezado a pensar en el cambio de piso que realizaré en breve, pues seguramente empezarán las obras en el próximo verano. Así que tengo que empezar a buscar dónde voy a vivir.
Sinceramente tengo ganas de encontrar mi sitio, donde realmente sienta que es mi lugar.
Todavía no sé si acabaré compartiendo piso, alquilando solo o, incluso, comprar una vivienda con una buena subvención de mis padres.

Pues ha sido una semana agotadora, durmiendo todos los días después de las 12. Ahora, al salir del trabajo, me tomaré unas tapitas con mis compis de currelo y luego me iré a casa a descansar; que tengo que ordenar la habitación, para un mejor descanso (hoy he leído algo sobre Feng Shui).

jueves, 29 de noviembre de 2007

Si Carrie Bradshaw hubiera sido gay (relato corto)


Seguramente si Carrie Bradshaw hubiera sido un hombre gay le hubieran ocurrido historias mucho más dispares de las que nos han ido contando en sus 6 temporadas, hasta el punto de haber tenido tirón para, al menos, otra más.
Supongamos que, en lugar de Carrie, podemos llamarlo Charles (pondré solamente C.) y podemos empezar a contar un relato.

C. había quedado con un antiguo amante, ahora amigo, para tomar café en un nuevo bar. Este amigo, francés, llamado François (F), estaba esperándolo cuando llegó. Tras el segundo, F quiso pedir una copa. A las cuatro o cinco copas ya estaban bastante contentos.
F., bastante más contento porque había tomado una o dos copas más, preguntó a C. qué pensaba sobre su expareja Andreas, un alemán con el que F. seguía viviendo.
Entonces, tras responder que le caía bien, F. soltó una frase ambigua, que dejó a C. un poco descolocado: A Andreas le gustas tú.
En estas circunstancias C. nota que es importante que el idioma materno sea el mismo. No termina de entender la frase, y por mucho que F. intente volver a explicarla, acaba pareciendo que Fran quiere que ocurra algo entre Charles y Andreas. Resulta extraño cuando parece que el propio Fran le tira los tejos a Charles.
Así que Charles se queda con cara extraña durante unos segundos, mientras pasa por su cabeza una expresión francesa: ménage à trois.

Con esta nueva amplia gama de relaciones, en las que tus ex pueden llegar a ser tus amigos, tus amantes o tus compañeros de piso, ¿existe realmente una relación de amistad "platónica", que no pueda verse enturbiada por la atracción sexual, los celos o la envidia? ¿Acaso los ex se pueden convertir en amigos, amantes o casamenteros?

Sin querer juzgar ni suponer, Charles continúa con su copa mientras la conversación deriva a otros derroteros.
Cuando ya deciden marcharse, Charles acompaña a su casa a F., pues le coge de camino para llegar a la suya. Ya en la puerta y sabiendo que Andreas está dentro, François invita a Charles a tomar una copa en casa. Charles, recordando el comentario anterior, decide entrar para ver qué pasa, a pesar de tener ganas de llegar a casa.
Nada dentro recuerda la frase ambigua anterior, hasta que, en un momento que Andreas está de espaldas, F. decide mandarle unos besos a Charles, que responde mientras se siente como un quinceañero pelando la pava delante de los padres.
Tras cenar, se marcha a casa, pensando en las cosas sorprendentes que tiene la vida.

My second homework is an e-mail



Es un e-mail a un penfriend, aunque realmente Rad me pidió que se lo mandara a él y es lo que he hecho.




Hi, Rad. How are you?

My name's Antonio and I'm from Cordoba-Spain, but I've lived in Seville since 1996. I'm 29.

I'm a civil servant, I work in the Employment Service.

I study English in an Official School. I speak Spanish and a little English. I want to learn English because I like to travel and i'd like to work in other country.

My family live in Cordoba. My father is retired and my mother is a housewife. They're 63 and 61 years old. I have two brothers. They're 34 and 22. My older brother is married.

I like music, reading and sports. I do capoeira and ride on my bike.I have a blog too. I think I'm a fanatic of cinema.

Write soon,
Antonio Torres


Imagen sacada de www.thamesis.es

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Esta noche he soñado...


... con un antiguo amor. Nos veíamos, hablábamos y quedábamos para salir por lugares nuevos, los que realmente me apetece conocer.
No había el romanticismo de la vuelta, ni sexo, ni una escena de tú-hiciste.
Todo era tranquilo y yo recaía en la ilusión de que volveríamos a recaer. Pero el sueño se quedaba ahí.

Segundo fin de semana de mi cumpleaños

Así que cogí mi mochila y tiré para Córdoba, a seguir celebrando mi cumpleaños. Y es que, si es cierto eso de las fiestas gitanas, hay que aprender de las cosas buenas que tenga cada cultura.

El viernes salí a dar una vuelta, para ver a la gente.

Ya el sábado, al mediodía, nos fuimos a la parcela de mis padres, a comer sardinas y chuletas.














Y el sábado noche, Inma muy amablemente me dejó su casa para hacer una cena y salir luego de marcha. Al final acabamos los dos solos de marcha.










jueves, 22 de noviembre de 2007

Definición (Volver II)

Si hay algo en lo que me puedo sentir maniático es en mi intento por definir las cosas. Y cuando escribo cosas me refiero a sentimientos y a relaciones.
Me gusta saber si ha sido pareja, rollete, amor (así lo defino cuando el sentimiento no ha llegado a pareja), amistad, amante y largo etcétera, que cada cual llamará de forma diversa.
Y es que últimamente por mi vida están pasando antiguas relaciones que ya se han convertido en fantasmas, en zombies que deambulan por mi mente. Alguno me produce tristeza (léase "Quién escribirá historia..." en este mismo mes), otro amistad y otro incertidumbre. Al final me acabo sintiendo como Michael Jackson en Thriller, un zombie bailando entre mis zombies emocionales.

De todos modos hoy toca hablar del fantasma de la incertidumbre, llamado así al ser producto de una relación pasada que no se definió por dos motivos:
El primero, que ni siquiera aún he logrado, viene de su nulidad para hablar de sentimientos, para afrontarlos y definirlos ante el interesado (yo).



El segundo, ya que en toda relación suele haber, al menos, dos personas, se debe a mi propia definición. Voy a explicarme. Ayer Carrie Bradshaw me dio la frase exacta:
Puede que sea eso: lo único capaz de definir una relación sea otra relación

Lo que quiero decir con este segundo motivo fue simplemente que por mi parte había otra relación que definía ésta. Tenía una puerta abierta de una relación que había acabado sin que yo me diera cuenta del final y que aún anhelaba. Me resultaba difícil, por no decir imposible, no comparar ambas relaciones: ahora tenía atención, serenidad y cariño, que antes había tenido en pequeñas dosis; pero ahora no tenía ganas de decir pareja y antes sí.
Así que tenía ganas de tener una relación de pareja con una persona que no estaba, mientras que con otra mantenía una relación que me daba miedo definirle, porque no quería saber cuál sería su respuesta ni si tendría alguna.

Entonces la relación terminó.
Con el tiempo nos hemos definido como amigos y he pedido que me desvelara si en algún momento había definido una relación que yo no me atreví a definirle.
Ahora este fantasma, tras un tiempo de amistad, quiere pasar a otra entidad corpórea que, por mi parte, seguirá denifiniéndose de la misma forma. No ya porque lo vaya a definir a través de otra relación, sino porque acabaría definiéndolo a través de la que tuvimos. Resulta extraño tener la incertidumbre de no saber qué espera de ti la otra persona, si le haces daño con tu definición no verbalizada o si su comportamiento responde a una definición que va más allá de una palabra.

Quizás con esta relación aprenda que hay cosas que no se pueden definir. O a alguno de los dos nos surja otra relación para definir esta.

Volver

Hoy tengo ganas de hablar de una palabra. A mí me ocurre que tengo palabras que son más que una mera sucesión de sonidos y un concepto abstracto. Las he oído o visto y ese contexto ya se les ha quedado grabado. Puedo oirlas o verlas en otros lugares, pero muchas veces se me transforman, a veces, en significados ya conocidos, aunque éstos sean duales o antagónicos.

Y una de esas palabras es 'Volver'.



Fue hace muchos años, cuando mi vida dio y buscó un cambio. Y empecé a leer poesía. Entonces llegó Cernuda. Recuerdo haber comprado un libro en Valencia y también recuerdo que mi madre me regaló "La Realidad y el Deseo" por un santo. Devoré ese libro, buscando y buscando poemas con los que sentirme identificado en un momento en el que mi vida se estaba empezando a definir, al estar dejando la adolescencia (lo que muchos adolescentes hacen entre los 14 y los 20, yo lo empecé a hacer con los 18... tengo mi ritmo). Recuerdo muchos poemas que me iluminaron (quizás suene fuerte, pero es la palabra que mejor lo define). En particular uno fue el culpable de que 'volver' dejara de ser un mero verbo.

Peregrino
¿Volver? Vuelva el que tenga,
Tras largos años, tras un largo viaje,
Cansancio del camino y la codicia
De su tierra, su casa, sus amigos,
Del amor que al regreso fiel le espere.

Mas, ¿tú? ¿Volver? Regresar no piensas,
Sino seguir libre adelante,
Disponible por siempre, mozo o viejo,
Sin hijo que te busque, como a Ulises,
Sin Ítaca que aguarde y sin Penélope

Sigue, sigue adelante y no regreses,
Fiel hasta el fin del camino y tu vida,
No eches de menos un destino más fácil,
Tus pies sobre la tierra antes no hollada,
Tus ojos frente a lo antes nunca visto.


A pesar de ser tremendo, en aquella época sabía hacia dónde no debía volver, que tenía que dejar cosas atrás y que no debería anhelar "un destino más fácil". Entonces el volver interrogante del principio resulta irónico, pues perfectamente todo el poema te afirma en un categórico NO.

Una vez cogida la palabra, era cuestión de tiempo que llegara otro contexto donde resultara significativa. Y entonces escuché el disco-canción Pedrá, de Extremoduro. Se trata de un disco con una única canción de 30 minutos, que yo escuchaba en mi primer piso de Sevilla, en una cinta de casete (la rae la escribe así). Escribo el fragmento:

Por volver como eres,
por volver como somos,
por la inmensa sonrisa de tus cansados ojos,
por volver donde alguien te quiere sin que vuelvas,
por poner a los mios con un poco más de luz.

(un buen rato con música, pues, aunque seguido, cambia el ritmo y el significado)

Cuando su mirada se ha cruzado con la mía.
saltó sólo una chispa y prendieron tantos fuegos,
que se fué la luz del día,
arrasamos los bosques,
también ví como ardían
los nidos en los postes.

Me voy a recortar en punta las orejas
y me voy a echar al monte a aullar entre la maleza,
volver no dudaría, ahora soy yonqui a mi manera,
ya no quiero tu amnistía, puedo morir donde quiera.


Aunque para mí estos dos volver en la canción sean antagónicos, por desgracia nada expresa mejor el significado real de la palabra volver. A veces he sentido la parte romántica, a veces la más dura y, quizás la mayoría, ambas, dando vueltas en mí cabeza.

Después ha llegado Chavela Vargas (Volver, volver, volver, a tus brazos otra vez...) y otras muchas canciones, frases de películas, de libros... que no quiero enumerar, pero de todos modos yo me quedo con estas dos.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

La sombra del friki es alargada



Si hay algo que todavía no termino de entender, por lo sutil del término, es las personas que se pueden considerar frikis por que tengan un determinado hobby.
Por ejemplo, yo llevo varios años escribiendo. Empecé mandando cartas y escribiendo diario, a veces he escrito en cuadernos cuando me ha apetecido, y ahora me dedico a escribir en este blog todo lo que me pasa por la cabeza. Debo pensar que soy friki por escribir en un blog, por escribir en general o, al ser un hobby que no me ocupa nada más que una parte de mi tiempo, que soy una "persona normal".
Hace unas semanas estuve en el Festival de Cine Europeo, donde llegué a ver 25 películas en versión original, y quien vea mi carpeta de películas, puede apreciar que tengo más de 300, clasificadas algunas por directores o temática. ¿En esto se puede decir que soy friki? ¿Acaso más aún que personas que se dedican a ir a ver cine "más comercial" o simplemente personas que se dedican a comprar libros?
Quizás también se pueda pensar lo mismo del deporte. Porque una persona que se sabe todos los resultados futbolísticos del domingo, calcula cuántas victorias necesita un determinado equipo para ganar la liga o no pasar a segunda o, simplemente, se dedica a picarse con el compañero de trabajo sobre si su equipo es mejor que el del otro, si merecía ganar o no. ¿Por qué resulta menos friki una persona así que uno que practica un deporte menos común o simplemente va al gimnasio para hacer máquinas o natación? Creo que es aquí, donde existen aficionados pasivos y activos, donde se ha hecho incluso un ranking de los distintos deportes, en función de el número de seguidores que tiene como forma de una mayor aceptación social.
Porque el principal problema que puede tener una persona para saber su grado de frikismo es el grado de aceptación que sus aficiones tienen en la sociedad. ¿Acaso no se mide en la norma general el grado de frikismo de la minoría?

Ante este conjunto de preguntas sin respuestas me reivindico en hacer lo que me dé la gana, que es lo que cualquier persona debe hacer.

Para más información sobre frikis:

http://es.wikipedia.org/wiki/Friki

y sobre el poster, está sacado de:

http://www.alvarezperea.com/diaorgullofriki/index.htm

Fotos de mi cumpleaños (primera parte)

Sábado 17 de noviembre, sobre las 9 de la mañana.








Sábado 17 de noviembre, 11 de la noche.








Martes 20 de noviembre, durante la tarde-noche, donde todos mis amigos llegaron a partir de las 7'30, pues el tiempo no acompañaba (alerta naranja por las lluvias, ni más ni menos), tomamos tarta, licor, unos lomitos a modo de pepito (porque había que tener algo fácil de preparar por si alguien se quedaba a cenar, y todo el mundo lo hizo) y un cubatita para después. La verdad que fue una noche de cumpleaños íntima y divertida.











Para ver el resto de las fotos:

http://anthonytowers.spaces.live.com/

martes, 20 de noviembre de 2007

Reflexiones en el día de mi cumpleaños

(que no es lo mismo que Reflexiones tirá en la pista de baile).

Realmente los alrededores del cumpleaños, junto con el periodo fin de año, suelen ser los momentos más propicios para realizar comparaciones sobre tu vida, hacer propósitos que luego no se van a cumplir y caer en un estado de depresión o alegría, en función de cómo hagas tus reflexiones.
Para empezar, éste es mi primer cumpleaños como funcionario, en un puesto de trabajo que me gusta bastante y que me permite, además de ayudar a personas desempleadas, poder, por ejemplo, estar escribiendo estas líneas.
Ya el año pasado estaba contento porque sabía que para estas fechas ya estaría con un trabajito fijo, el que me había currado tras varios años estudiando (a ratos), compaginándolo con un trabajo intermitente; que me obligaba a cambiar mi domicilio entre Sevilla y Córdoba (gracias a mi padre, que tiene paciencia y me ayuda en todas las mudanzas).
Por lo menos ya sé que en los dos próximos años viviré en Sevilla, ahora mismo con Antonio, en su casa, y en un futuro no sé si seguiré aquí.
Por que ya hasta el gobierno, de una forma indirecta, va diciendo que las ayudas de alquiler son para menores de 30 años. Que si llegas a los 30 sin casa propia eres un pardillo que no merece ayuda ni ná.

Me estoy volviendo más exigente respecto a las personas que conozco, pues me gusta rodearme de la gente que realmente me merece la pena, que me puede aportar algo. Muchas veces me río de esta cualidad o defecto que estoy cultivando, pues en el fondo tiene algo de delirios de grandeza propios de un funcionario con plaza recién adquirida. Y es que quiero tener pareja de nuevo, pero no tengo ganas de volver a caer en los mismos errores del pasado; y eso que en aquellos tiempos se trataban de casos en los que la intuición me decía que podría funcionar y que merecía la pena luchar (la verdad es que esto último fue cierto, mereció la pena). Quizás lo que me falla es la intuición, que me hace caer en errores y no me deja conseguir aciertos.

Con los años, además de tener cada vez menos pelo, me estoy volviendo algo más dormilón, pero con más energías. Me gusta cada vez menos la inactividad, por lo que tengo que buscar actividades extralaborales que realizar por las tardes.

En muchos aspectos me siento extraño, un poquito perdido. Y es que parece que tengo que hacer algo en mi vida, pero todavía no sé el qué. Por ahora me dedico a disfrutar y esperar a ver si aparece una señal (del cielo) que me dé alguna pista.